lunes, 19 de octubre de 2015

Chin chin



Por los amigos que han bailado y cantado con vos, con y sin música, con motivo y sin motivo.
Por los amigos dicen te quiero sin ninguna fecha especial.
Por los amigos que te ven saltar y sin preguntar saltan junto a vos simplemente para compartir tu alegría.
Por los amigos que te acompañan en tus locuras.
Por lo amigos que no hace falta su presencia física para estar.
Por los amigos que saben que estas cometiendo un error pero sin embargo te apoyan, y después te consuelan.
Por los amigos que te dicen: te lo dije, pero va a estar todo bien.
Por los amigos que se aceptan tus ridículos apodos cariños simplemente porque viene de vos.
Por los amigos que te dicen estás loca, y por eso te quiero.
Por los amigos que cuando lloras, te dan un abrazo fuerte.
Por los amigos que cuando piensan en ellos, le sacan una sonrisa.
Por los amigos que comparten las buenas y las malas.
Por los amigos que te dan un obsequio, solo porque vieron algo que era para vos.
Por los amigos que te conocen más que a vos mismo.
Por los amigos que son familia.
Por los amigos que se extrañan.
Por todos, brindo por ellos.



jueves, 23 de abril de 2015

Dice la leyenda


Hace mucho tiempo visite la ciudad catalana de Barcelona,  paseando por la rambla  justo el día Internacional del libro observe que con un libro siempre te entregaban una rosa, pensé que era una algo del momento, me llamo la atención pero no indague en profundidad.
Años más tarde alguien me contó la leyenda, me pareció muy linda, amén de que no vivamos en Cataluña, es una buena forma de regalar un libro. Así que comparto la historia con ustedes, y tal vez los motive a seguir esta bonita tradición.

Dice la leyenda que la villa de Montblanc estaba siendo aterrorizada por un colosal dragón. La bestia se había instalado a las afueras del pueblo, infectando el aire y el agua con su aliento apestoso y causando estragos entre el ganado. En su búsqueda de alimento, cada vez se aproximaba más a las murallas, por lo que los vecinos tuvieron que buscar una forma de mantenerlo apartado. Empezaron dándole de comer ovejas; cuando éstas entre el ganado. En su búsqueda de alimento, cada vez se aproximaba más a las murallas, por lo que los vecinos tuvieron que buscar una forma de mantenerlo apartado. Empezaron dándole de comer ovejas; cuando éstas se acabaron, siguieron con los bueyes, y luego con los caballos. Y por fin no tuvieron más remedio que sacrificar a los propios habitantes. Se metieron los nombres de todos en un puchero, también el del rey, y el de su hija la princesa, y cada día una mano inocente decidía quien moriría la mañana siguiente. Y una tarde la escogida fue la princesa. Dicen unos que el rey lloró y suplicó a sus súbditos por la vida de su hija, pero que de nada le sirvió, ya que no era el único padre desconsolado. Cuentan otros que el rey entregó a su hija con valentía y entereza. Sea como fuere, la joven salió de las murallas y se dirigió hacia su triste destino.
Cuando el terrible dragón avanzaba hacia ella, surgió entre la bruma un hermoso caballero vestido de blanco sobre un caballo blanco que arremetió contra la bestia. El animal, herido, se sometió al caballero, que le ató al cuello un extremo del cinturón de la princesa. La dama tomó el otro extremo del cinturón y, para pasmo de los pobladores de Montblanc, condujo al dragón como a un perrito hasta la puerta de la ciudad. Allí, a la vista de todos, el caballero remató a la bestia de un certero golpe de lanza. Dicen unos que el dragón se fundió y fue absorbido por la tierra. Cuentan otros que un gran charco de sangre se formó a los pies del caballero. Sea como fuere, en aquel mismo instante creció un rosal y de sus ramas brotaron rojas rosas. Jorge, o Jordi, o George, o Giorgios, que es como se llamaba el caballero, obsequió a la princesa con una de esas rosas.
Semejante gesta hizo que el santo caballero alcanzase fama y popularidad durante la Edad media, y que fuera escogido patrón de la caballería y la nobleza.
Porqué según la tradición, en este obsequio se aúnan tres características: una única flor, que simboliza la exclusividad del amor por parte del enamorado, el color rojo de la rosa, que simboliza la pasión y la espiga de trigo, que simboliza la fecundidad. Por eso es un buen elemento para regalar a una persona amada en un día tan especial como este.

A esta tradición centenaria, se suma el hecho de que en 1995, la UNESCO declaró también el 23 de abril Día Mundial del libro.

domingo, 8 de febrero de 2015

Aquel

Pobre de aquel  que no puede hablar con libertad
Pobre de aquel  que no puede hablar con sinceridad
Pobre de aquel  que no puede mirar con la verdad
Pobre de aquel  que no puede hablar sin criticar
Pobre de aquel  que no puede vivir sin molestar a los demás
Pobre de aquel que no puede vivir con dignidad
Pobre de aquel  que no  puede
Pobre de aquel  que no intenta simplemente vivir
Pobre de aquel  que no puede vivir con sinceridad
Pobre de aquel  que vive sin sonrisa
Pobre de aquel   que no valora la soledad
Pobre de aquel  que no se permite vivir y no deja vivir a los demás
Pobre de aquel  que solo vive de juzgar
Pobre de aquel  que  siente odio, envidia y rencor
Pobre de aquel  que no le late el corazón.